La madre de Gabriel Toimil fue fusilada por los franquistas tras dar a luz por ser “roja y revolucionaria”
En 1937, en plena contienda civil de España contra España, un tribunal militar la condenó a muerte por “roja y revolucionaria” en un proceso “plagado de irregularidades”. Estaba embarazada. No hubo clemencia, sólo cárcel. El 31 de octubre, Amada García Rodríguez alumbró a su hijo en el hospital de Caridad de Ferrol. El único varón de tres hermanos. Le llamó Gabriel, como el padre, Gabriel Toimil.